EL BALLET... EL ARTE DE SABER

Jennifer Santiago.

El ballet, del italiano “balleto” en español “baile” es una forma concreta de danza, en esta forma de expresión artística se puede incluir: danza, mímica, teatro, orquesta, espectáculo y coral.

          
  Pero… se preguntarán ¿Por qué? ¿Por qué el tema del ballet? Pues, muchas personas no tienen la menor idea de lo que esto significa, o solo piensan que se trata de “Dar vueltas sobre su propio eje” pero no, el ballet es una danza cuyos movimientos se basan en el control total y absoluto de la mente y el cuerpo, es aquella sensación de con tus pasos hablar el lenguaje corporal y expresar todos tus sentimientos y darle a entender al mundo que con mucho esfuerzo puedes lograr aquello que quieres, no importa donde, cuando, y como. 

        
    En la actualidad, éste término de la danza es tomado como un tabú para el género masculino, o simplemente se abstienen a tener el valor de practicar este arte porque se pueden considerar homosexuales, pero como un dato curioso el ballet hasta el año 1681 solamente era ejecutado y se les concedía a las hombres; a finales del siglo XV en las cortes italianas, donde se representan diferentes números y movimientos, nace el ballet, aunque el ballet de corte francés se estrena como danza y espectáculo, por primera vez el 15 de octubre de 1581, en París-Francia, por el coreógrafo, violinista y compositor italiano Balthazar de Beaujoyex, con su obra “El Ballet cómico de la Reina” que fue una composición musical y coreografía considerada el punto de inicio hacia el ballet cómico clásico…

Pero… gracias a la obra “El Triunfo del amor” de Jean Baptista Lully, Beaucham Y Pécourt se rompió la tradición porque comenzaron a aparecer las primeras cuatro bailarinas sobre el escenario.

Es ahí donde las mujeres comienzan a predominar, pues, a principios del siglo XVIII aparece una bailarína franco-belga Marie Anne de Cupis Camargo quién revolucionó el ballet mucho más allá porque ella realizaba al danzar pequeños saltos que podían ejecutar solo los hombres, gracias únicamente, a que modificó las danzas de corte de aquel tiempo junto con sus reverencias… Y ¿Cómo lo hizo? Quitándose los zapatos de tacón y acortando ligeramente su falda. Ésta acción creó un éxito notable, y más exaltante cuando nacen las zapatillas de punta, entonces con el tiempo se comenzó a desarrollar la danza en puntas y solo los bailarines podían permanecer en la posición unos pocos segundos, y las mujeres mantenían más su “Balancé”

Ya para el año 1832, surge la obra “Las Silfides”  coreografiada por Filippo Taglioni, el centro de la obra era su hija llamada Marie Taglioni quién fue la primera mujer que logró pararse en puntas después de muchos años de práctica. A partir de allí se comenzó a ensayar con los pies en punta las mujeres ya que ellas tenían la fuerza suficiente para mantenerse en éstas zapatillas y los hombres no, por eso ellos danzan en zapatillas de tela o medias puntas.

Con toda ésta revelación que crearon las mujeres, comenzaron a predominar en el ballet, y los hombres se sienten reemplazados por el hecho de que las bailarinas pueden hacer todo lo que ellos hacían y más.

En la actualidad, el ballet se ha extendido por todo el mundo, conquistando la pasión de muchos niños, jóvenes y adultos… Pero, a pesar de esto, los entes gubernamentales no dan el apoyo a las academias en Venezuela ya que no es su folklore, y es un hecho lamentable pues no se da a conocer el talento nacional que existe en nuestra Venezuela.